VII Coloquio de Infancia

Este Coloquio hizo parte de los contenidos curriculares del año 2018 de la Especialización en Infancia, Cultura y Desarrollo y  la Maestría en Infancia y Cultura.

En este blog se propició un diálogo sobre los principales temas del Coloquio para promover el aprendizaje colectivo a partir de las experiencias y saberes de los estudiantes de la Especialización y de la Maestría.

El Coloquio generó una serie de reflexiones que contribuyeron a comprender la relación entre el mundo de las tecnologías y el mundo de los niños. Sabemos que las tecnologías, no son sólo proveedoras de información, también son portadoras de imágenes, relatos y fantasías, que hacen parte de la llamada Cultura Digital, en tal sentido, interesó la producción de un diálogo entre el conocimiento producido en la Maestría, el grupo de expertos en el tema y la comunidad de estudiantes.

Fecha de realización: Noviembre 27 de 2018
Hora: 7:00 a.m.-6:00 p.m.
Lugar: Aduanilla de Paiba, Auditorio Central.

Calle 13 No. 31-75

Equipo Organizador

VII Coloquio de Infancia

11 pensamientos en “VII Coloquio de Infancia

  1. Me parece muy interesante este Coloquio que ofrece la Maestría en Infancia y Cultura. Quisiera saber cual es el programa del evento para pensar en asistir como docente de planta de la FCE.

  2. Excelente encuentro, satisfecha con las expectativas espero que se continué dado estos espacios de formación.

    Nombre: Luisa Fernanda Aldana Suarez
    Especialización en infancia cultura y desarrollo
    Grupo: I
    Semestre : II

  3. Considero que podríamos hablar solamente de la escuela y la educación, sino también del ambiente cultural en que se desarrollan los sujetos. Siendo la escuela el conector entre el individuo y la cultura, puede diseñar estrategias significativas y contextualizadas para determinada población que posibiliten una trasformación respecto al uso, al manejo de las herramientas digitales y tecnológicas que e encuentran inmersas actualmente y condicionan a la sociedad.
    La educación y la escuela deben tener la conciencia de la pérdida de corporeidad y memoria que provoca el uso excesivo de la tecnología, con el objetivo de modificar esos patrones de empleo de esta categoría. Partiendo de la necesidad evidenciada, la educación debe pensarse y reconocer la importancia de la creación de ambientes propicios que mejoren la relación, la regulación, la comprensión, el manejo y la interacción entre los medios y seres humanos. Al identificar esta falencia del mundo digital y medios comunicativos, se puede apostar por un cambio cultural y educativo en la sociedad actual.

  4. Maravillosa experiencia, donde tuve la oportunidad de conocer otras posturas y opiniones frente a la infancia por parte de ponentes con amplio conocimiento, espero se sigan dando estos espacios tan funcionales que aportan en nuestra formación profesional.

    Natalia sofía Alfonso Vanegas.
    Especialización Infancia,Cultura y Desarrollo.
    Lenguaje,discurso y saberes
    2 Semestre.

  5. En el recorrido histórico por el que se ha desenvuelto la prácticas de la infancia hasta nuestros tiempos, es clara la imagen, de un niño invisibilizado y rezagado por el mundo del adulto. Subordinada la voz del niño en una cultura tradicional que puja por un progreso social y económico, que busca a toda costa dejar de ser un país tercermundista, con un basamento de ideales vacuos: afán de dinero, apariencia de progreso, afán de fama o popularidad fácil, crecen y se desarrollan las nuevas y repetitivas generaciones, sumándole a la actual, la vivencia en valores frágiles ya casi olvidados.
    Los instrumentos se han actualizados, pero siguen estando los mismos bárbaros civilizados manejando la manivela, somos producto del consumo y en el ágil correr de una cultura digital, o cultura desbocada, ¿cómo transita la voz del niño? ¿Cómo las instituciones familia, escuela y estado pueden mediar para generar espacios de comunicación en que el niño sea agente de un discurso social y político? Corsaro (1997) propone un nuevo escenario para comprender el desarrollo y vislumbrar la voz del niño, no propiamente desde las competencias cognoscitivas o evolutivas, sino parecido a un telar de araña, comprender qué productos de la sociedad, cultural y familiar lo han influenciado y lo han llevado a ser lo que es ahora.
    El niño en el centro del tejido devela la influencia hegemónica que ha ejercido la familia, desde la imposición de un nombre, a creencias ideológicas, en qué creer y que no, como actuar y como reprimir, a eso sumarle la gran labor de higienización que se implantó en la escuela con influencia de la iglesia para formar niños que cumplieran con la promesa del nuevo hombre para la sociedad del mañana. Ahora bien, en la actualidad la sociedad continúa circulando de un modo similar, a esta, habría que adicionarle, el uso de medios digitales, quiénes como extensiones del hombre o “protesis” planteó Mcluhan, están construyendo y reproduciendo nuevas prácticas simbólicas tan complejas como la anterior, en donde el niño y niña sumergidos en un mundo de información adulto céntrica, en compañía de cientos de amigos de redes sociales, queridos por los mensajes estáticos de un emoticón en reemplazo del abrazo y la palabra del padre, demuestran una vez más el individualismo y la frivolidad con la que el mundo de poder trabaja.
    Nativos digitales, términos usados para hacer referencia a aquellos niños que son ágiles en la manipulación del instrumento, pero que a la hora de comprender la información que circula, se quedan y nos quedamos en la mera reproducción de discursos triviales; que como bien dijo el profesor invitado al VII coloquio de infancia: Laboratorio de Voces: Infancia y Cultura Digital 2018, Offray Vladimir “desde la escuela no nos han enseñado a pensar, a dar un sentido crítico a la información”, implícitamente se está dejando que sea el mismo instrumento que reemplace el rol del mediador, de docente y de padre y continúe alimentando, por un lado la brecha generacional entre el adulto y niño y por otro lado, que sea el encargado del entretenimiento y dispersión del menor en momentos de ocio familiar y escolar.
    Desde la escuela o bien se encuentran los medios a la mano, pero nadie sabe cómo usarlos o solo el profesor de tecnología, bajo un currículo ya programado brinda la posibilidad de acercamiento al mundo de la internet ¿Qué tan difícil es pensar en la conformación de comunidades digitales y espacios para entablar diálogos coherentes a la realidad nacional? Si bien espacios como el programa “Tripulantes” dirigido por la profesora Floralba o “Con alma de niños” de la Universidad Nacional, permiten situar al niño desde un rol agente social y político, pues la diversidad de temáticas que se producen en estos medios, permiten develar que con todo e influencia de la sociedad en los discursos de los niños y niñas, se puede develar una voz, que piensa en otro orden el mundo, que pueden proponer soluciones tal vez no tan complejas y artificiales como las del mundo de los adultos.
    De este modo, se abre la invitación para que tanto el estado, las familias y la educación nos demos la oportunidad de ver de acercarnos a los niños nos desde nuestras propias intenciones sino desde la mirada de ese niño que también fuimos.

    Sonia Andrade
    Estudiante de maestría en infancia y cultura
    Énfasis en lenguaje y narrativas infantiles
    Primer semestre

  6. La educación como parte fundamental en los procesos de vida de los niños y niñas, y que parte en gran medida desde la familia y/o los lugares-personas que hacen las veces de la misma, pues no necesariamente en el núcleo judío cristiano, sino desde los mundos en donde ellos han cifrado su existencia y desde donde han tenido que configurar una cultura; es de gran importancia pues, es eje fundamental de valores, comportamientos, formas de ver el mundo y formas de concebir la proyección de sus vidas, esta educación es de gran importancia dado que, permite configurar la estructura del vida y asumir de una manera propositiva los mundos que los rodea o no tenerlo, dadas las circunstancias de cada individuo. Una vez llegan a la escuela, pueden continuar configurando sus mundos, siempre y cuando las políticas den paso a dichas pretensiones de los niños, niñas y adolescentes y más aún si cuentan con maestros que recojan los interés y objetivos de sus estudiantes, aquellos inspiradores y arriesgados a traspasar las barreras del descuido familiar, o de las políticas rígidas y estáticas que ven como números y estándares a los estudiantes y no como mundos que desean abrir otros mundos, otros horizontes u otras formas de concebir al mundo, y que constituyen la transformación de sus espacios, de sus circunstancias o de sus realidades (refiero el trabajo de la profesora Omaira y el grupo de investigación) que aún sin estar centrado en una escuela, si hacen escuela en lugares en donde la vida de los niños pueden mejorar y por supuesto sus familias.

  7. Desde mi perspectiva considero que estos espacios nos permiten aprender, mejorar y ser mejores docentes y pedagogos. Todas las conferencias aportaron grandes conocimientos en mi proceso.
    Observar los trabajos de mis compañeros me deja con ganas de investigar y con la voluntad de saber que quedan muchos proyectos por hacer para ayudar a nuestro niños y niñas .

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