Capitulo 3: Lluvia de ideas
La lluvia de ideas, concebida por Alex Osborn en la década de 1940, representa una estrategia invaluable en el proceso de diseño e innovación. Su génesis surge de la necesidad de contrarrestar las limitaciones inherentes a las reuniones de negocios convencionales, las cuales a menudo sofocaban la creatividad y generaban un flujo reducido de ideas. Osborn, al percatarse de esta carencia, ideó un método que permitiera estimular el pensamiento fresco entre los individuos, creando así un espacio abierto y sin prejuicios que fomentara el intercambio de ideas sin restricciones.
Lluvia de ideas desde la Ingeniería
Realizar la lluvia de ideas desde la perspectiva de la ingeniería implica aplicar esta técnica dentro del contexto específico de los problemas y desafíos que enfrenta esta disciplina. Aunque la lluvia de ideas en sí misma no varía en su procedimiento, la forma en que se evalúan y aplican las ideas puede diferir según la rama de la ingeniería y el tipo de problema que se esté abordando.
La metodología para llevar a cabo la lluvia de ideas desde la ingeniería puede dividirse en varios pasos:
- Descubrir hechos: En este paso, se identifican las situaciones problema dentro del entorno de trabajo.
- Planteamiento del problema: Es fundamental especificar el tema sobre el cual se va a generar ideas.
- Producción de ideas: Este es el corazón de la lluvia de ideas. Se concentra en generar un gran volumen de ideas en un tiempo delimitado.
- Descubrir soluciones: Una vez que se ha generado una gran cantidad de ideas, se procede a depurar la información y determinar cuáles son las soluciones factibles al problema
Material complementario
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Técnicas de lluvia de ideas: Como innovar en grupo