Los problemas más comunes de la congestión crónica del tráfico en las ciudades y sus consecuencias negativas son: la pérdida de tiempo, deterioro de la salud por la contaminación atmosférica y sonora, accidentes de tránsito, afectaciones al paisaje y la biodiversidad, parámetros que afectan negativamente la economía de la sociedad. Para lograr un cambio visible a estos problemas se deben implantar medidas y cambiar los hábitos actuales de desplazamiento de todos los actores de la cuidad, el modelo de movilidad urbana sostenible busca la protección del medio ambiente disminuyendo la generación de gases de efecto invernadero, mejorar la calidad de vida de los ciudadanos garantizando la accesibilidad a cualquier punto de la cuidad y favorecer el desarrollo económico mejorando la calidad del entorno urbano.

Existe una clara necesidad de alternativas de transporte urbano que sean flexibles, cómodas y limpias dentro de las áreas urbanas. La Universidad Distrital y el Plan Institucional de Gestión Ambiental-PIGA están comprometidos con los lineamientos de gestión ambiental en la ciudad, razón por la cual incluye en el programa de implementación de prácticas sostenibles la línea de movilidad urbana y le apuesta a la bicicleta como medio de trasporte urbano alternativo para los estudiantes, docentes y funcionarios, y de esta manera transformar la cuidad a un modelo de desarrollo más sostenible.